jueves, 4 de octubre de 2007

RÓMULO Y REMO EN CLASE

No tengo imágenes de la loba capitolina, así que traigo mi foto con un león helenístico del siglo I. a. C. que se encuentra en el Museo Arqueológico de Rodas.
Les conté a mis alumnos el mito de la fundación de Roma (la fábula de Rómulo y Remo). Hicieron un resumen en 15 líneas con su propio lenguaje y al día siguiente hicimos un ejercicio de retórica que consistía en memorizar el mito y contarlo en público.
El ejercicio de oratoria salió a la perfección. Como imaginé, estaban más nerviosos los primeros que salieron a la tarima que los últimos, que ya se sabían la historia de memoria, después de oír a todos sus compañeros. Había alumnos que la exposición publica les gustaba mucho y disfrutaron contando el mito de manera convincente y auténtica. Un alumno que estudiará después arte dramático lo contó especialmente bien, como era esperable. Una alumna andaluza le puso salero al asunto y quedó francamente divertido. Otros lo hicieron simplemente de carrerilla.
En conclusión, animo a los profesores de lenguas (española, inglesa, francesa...) a que hagan este ejercicio de oratoria que aprendí una vez en un cursillo y que me ha servido para conocer mejor a mis alumnos.

3 comentarios:

Dori dijo...

En esta foto tienes la misma cara que la del león. Pero el león sonríe más que tú.

Juan Carlos Sesé dijo...

Te aseguro que hay muchos momentos en que me comporto como un león. Y no hace falta reír para hacer ciertas cosas

Marta dijo...

¿Un león? Jajaja.

Tú lo que eres es un fantasma...